Por algún extraño motivo en mi memoria cuando pienso en poesia solo acuden dos poemas, no recuerdo los nombres de los autores, este es el primer poema:
En tiempos de bárbaras naciones,
pendían de las cruces los ladrones,
hoy, en este siglo de adelantos y luces,
del pecho del ladrón, penden las cruces.
pendían de las cruces los ladrones,
hoy, en este siglo de adelantos y luces,
del pecho del ladrón, penden las cruces.
El segundo, va como cuento, segun la anecdota narrada en una borrachera, un famoso poeta fue invitado a un poblado (estoy seguro fue Durango) con la oculta intención de los lugareños de obtener un poema de tan ilustre personaje sobre su poblado, fue tanto el acoso que al marcharse antes de lo previsto les menciono, "Por cierto el poema sobre el pueblo esta sobre la almohada de la cama, gracias por todo" el poema en cuestion fue este:
Cuatro pinches callejones,
un arroyo de cagada,
una bola de cabrones,
y un calor de la chingada.
3 comentarios:
Ha de ser del cabrón de Dijo el Cuervo...
Yo escuché el segundo poema en un lugar perdido en la Huasteca potosina, pero ya no me acuerdo dónde fue.
Pues el segundo te lo escuchè a tí y el primero, primera vez que lo leo, pero está muy chido, muy épico.
jajajaaj el segundo esta excelente!
me lo voy a aprender para esos momentos de convivencia etílica!
un saludo
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